Con todo y su amplísima trayectoria, Ethan Hawke confiesa tener una cuenta pendiente: ¡prestar su voz para una película animada!
Ethan Hawke tiene casi 40 años como actor. Una carrera que va del indie a las superproducciones, y que por supuesto incluye numerosos éxitos y reconocimientos. Sí, también cuatro nominaciones al Óscar, dos histriónicas y dos como guionistas. Una trayectoria tan redonda que cualquiera podría pensar que estamos ante alguien sin cuentas pendientes de ningún tipo. No es el caso, ya que el histrión confiesa que sueña con hacer animación.
“Toda mi vida como actor soñé con recibir un correo electrónico que dijera: ‘Puedes hacer una audición para la voz en uno de estos. Nunca he hecho [una película animada]. Nunca ha venido nadie”.
La declaración fue realizada en conversación con el también actor Daveed Diggs para la revista Interview. Lejos de quedarse aquí, Hawke complementó diciendo que su deseo es tal que tiende a compararse con otros actores que prestan su voz a distintos proyectos animados.
“Veo todas estas películas y pienso: ‘Oh, podría hacer la voz de ese tipo’.”
El mayor acercamiento de Ethan Hawke con la animación se dio en un episodio de 2007 de Robot Chicken. Fuera de eso, el actor nunca ha prestado su voz a ningún otro proyecto de este tipo. Ni siquiera para Richard Linklater, director responsable de la trilogía Before y quien acumula tres largometrajes animados en su filmografía.
No es la primera vez que el histrión se manifiesta sobre la actuación de voz en la animación. Hace apenas unos meses ahondó en su pasión en entrevista con Audible:
“Como intérprete, el poder de la voz es una forma de arte en sí misma. Y me encanta el diseño de sonido. Cuando vas por primera vez a la escuela de actuación, una de las primeras clases a las que te llevan es voz y habla, y sobre lo que se puede lograr. Los directores de teatro realmente geniales con los que he trabajado eligen personas en función de sus voces”.
Ethan Hawke ha demostrado sus dotes en más de una ocasión. Sólo nos queda esperar para descubrir si algún estudio de animación, ya sea uno independiente o un gigante de la industria, aprovecha esta franca petición del actor para un casting de ensueño para cualquier producción.